PIMEM y el Colegio de Graduados Sociales solicitan medidas que protejan a las micro y pequeñas empresas
La Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM) y el Colegio de Graduados Sociales de Islas Baleares quieren avisar del gran riesgo que corren las micro y pequeñas empresas de la comunidad. El Real Decreto Ley 18/2020 publicado el pasado 13 de mayo ha provocado un agravio comparativo entre este tipo de empresas y el resto del tejido empresarial.
En dicho decreto se estableció una nueva tipología de Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por fuerza mayor. Aparecen los ERTE de Fuerza Mayor Total y los ERTE de Fuerza Mayor Parcial.
Mediante esta diferenciación se pretendía dar la posibilidad a las empresas de ir sacando del ERTE a sus empleados poco a poco y a la vez ofrecer unas bonificaciones o exoneraciones a esas empresas que optaran por retomar su actividad. Unas bonificaciones a la seguridad social del 85% para las personas incorporadas y del 60% para las no incorporadas, a empresas con menos de 50 trabajadores.
Es cierto que se trata una medida atractiva para las empresas. Apoya y favorece al desarrollo de la actividad empresarial y al mantenimiento de los empleos. Ahora bien, también se está creando un agravio comparativo con las micro y pequeñas empresas que desde PIMEM y desde el Colegio de Graduados Sociales creemos que es necesario solucionar.
Estas micro y pequeñas empresas que como mucho tienen a uno o dos o tres trabajadores han realizado un gran esfuerzo sobreponiéndose a esta grave crisis que sufrimos y sacando del ERTE a sus empleados una vez comenzaron las fases de desescalada. Nuestra preocupación nace porque según la normativa y según el Real Decreto publicado el 13 de mayo, estas empresas no van a poder beneficiarse de las condiciones que ofrecían los ERTE de Fuerza Mayor Total y el Parcial.
El hecho de recuperar a todos los empleados de estos expedientes de regulación temporal de empleo implica la finalización de los mismos y las ayudas respectivas. Beneficios que si que van a poder seguir acogiéndose el resto del tejido empresarial.
Desde las dos instituciones creemos y vemos necesario que se apliquen una serie de medidas enfocadas a mejorar las condiciones de estas micro y pequeñas empresas. Unas ayudas para aquellas empresas que han realizado ese esfuerzo y que han sido las primeras en reactivarse. No entendemos cómo es posible que este tipo de empresas se puedan ver obligadas en estos momentos a asumir íntegramente los costes de la seguridad social de sus empleados. “Desde Pimem pensamos que en estos momentos tan complicados no pueden producirse agravios a las micro empresas frente a las grandes empresas” aseguran des de la Federación.